El futuro del arte es online

Entrevista a Marga Sánchez e Isabel Yanguas galeristas de renombre

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RCA: ¿Cómo comenzasteis en el mundo del arte?

Marga Sánchez: Tanto Isabel como yo hemos estado siempre muy vinculadas al mundo del arte y de una forma u otra hemos sido no solo aficionadas sino que hemos ido comprando a lo largo del tiempo, no podemos decir que en grandes cantidades, pero sí hemos tenido una presencia del arte en nuestra vida. En un momento determinado, las dos éramos empresarias de éxito y vendimos nuestras respectivas empresas a empresas extranjeras, nos dimos un año sabático. Coincidió que las dos habíamos vendido prácticamente al mismo tiempo y pensamos a qué nos íbamos a dedicar. Teníamos ofertas para dedicarnos al mundo empresarial, pero nuestra pasión por el arte era una faceta muy fuerte y una asignatura pendiente que teníamos.

Decidimos que nos dedicábamos al arte. Podríamos habernos dedicado solo como coleccionistas (yo de hecho soy coleccionista), pero sí es cierto que teníamos una tendencia empresarial muy fuerte y fue por eso por lo que decidimos dedicarnos a ser galeristas. Esas fueron las motivaciones -muy pensadas, muy reflexionadas- que nos llevaron a abrir una galería.

Pero nuestra relación con el arte ya estaba antes de la galería. Hemos tenido muchos amigos muy cercanos de este mundo, yo he tenido una empresa de edición de grabados con la Galería Punto de Valencia, estuve muchas veces pensando en poner una galería en mi vida…Otra cosa es que hemos sido mujeres importantes dentro del mundo empresarial, un mundo en el que había muy pocas mujeres, por otro lado.

RCA: ¿Cómo os conocisteis?

Isabel Yanguas: Nos conocimos profesionalmente porque Marga presidía una compañía y yo otra y Marga era mi cliente

RCA: ¿La idea de abrir la galería de quién de las dos surgió?

IY: De Marga, de una noche que me llamó…

MS: Yo creo que de las dos, porque el enfoque del arte estaba ahí, lo que sucede es que quizá fui yo la que di el impulso final.

IY: Fue estupendo. A la una de la mañana me llamó y me dijo: “Yo creo que de las cosas que hemos barajado al final tiene que ser una galería”. Yo le respondí que genial, que sí, porque el arte en nuestra vida es una pasión.

RCA: ¿Tú también eras coleccionista, Isabel?

IY: No, yo he tenido siempre arte en mi casa pero no soy coleccionista.

RCA: ¿Cuáles son las aptitudes de un coleccionista?

MS: Yo creo que somos obsesivos, compulsivos. El punto esencial para ser coleccionista es tener el deseo de poseer las obras, tener el nivel económico para adquirirlas y disponer del espacio para colocarlas. Y, evidentemente, amar el arte, salvo que colecciones como inversión, pero en mi caso ha sido un coleccionismo que se debe a la pasión.

RCA: Vuestras visiones son complementarias porque se suma, además, la visión de Marga como coleccionista. ¿Sentís que miráis las obras de manera diferente?

IY: No, no necesariamente, porque cuando miramos una pieza a mí me basta con verla en un museo o en una galería y Marga la quiere poseer.

MS: (Ríe) Sí, yo la quiero tener, sí. Isabel está siempre más dispuesta a vender y a mí cada vez que vendo una pieza que me gusta, me da una rabia…

IY: El coleccionista tiene que refrenarse para no llevárselo todo a su casa.

MS: Sí, así es.

RCA: ¿En qué año abristeis la galería y cómo fue el proceso?

IY: La abrimos en abril del 2003 cuando ya habíamos estudiado el mercado y habíamos visitado los mejores países para ver dónde estaban las mejores galerías del mundo y nos pareció que era una buena época para abrirla. En el espacio en el que estamos hoy es el segundo espacio que tenemos.

MS: Abrimos dos espacios, uno que era en la esquina de Conde de Xiquena y otro que era un piso.

RCA: ¿Cómo os cambiasteis a este?

IY: Queríamos encontrar un espacio con unas alturas de techo determinadas, que no es fácil en Madrid, tuvimos la suerte de encontrar este (Conde de Aranda, 4) y poder reconvertir dos espacios en uno. Aquí podemos hacer dos exposiciones si queremos, igual que hacíamos antes en dos espacios diferentes. Era más cómodo logísticamente y también más cercano a lo que siempre habíamos querido. Además ya estábamos suficientemente establecidos como para poder cambiarnos a cualquier parte en Madrid.

RCA: ¿Cuál es la línea artística de la Galería Distrito 4?

MS: Nosotros analizamos qué es lo que podíamos hacer. Teníamos muy claro que queríamos arte contemporáneo y vimos que las galerías de aquel momento aquí tenían sobre todo artistas españoles y pocos artistas extranjeros. Así que nosotros nos centramos en artistas extranjeros y, dentro de eso, nuestra línea es ecléctica, en el sentido que tenemos abstracto, figurativo y trabajamos con cualquier medio, diversos soportes, vídeo, fotografía, pintura, escultura, instalaciones…Tenemos artistas consolidados, emergentes, tanto españoles como extranjeros.

IY: Pero siempre contemporáneo.

RCA: ¿Vuestro proyecto de galería tenía intención de situarse en el escenario internacional?

MS: Nuestra galería está en el mundo, en ese sentido, tiene su representación internacional y su representación de artistas nacionales, como cualquier galería. Otra cosa son los mercados. El mercado español no es muy fuerte, pero nosotros consideramos que estamos en línea con las galerías de otros países del entorno.

IY: Lo cierto es que al final eres lo que has hecho a través de tu vida y nosotras somos dos personas muy internacionales, que llevamos desde muy jóvenes estudiando y viviendo fuera. Y Ese bagaje cultural lo aplicas en todos tus comportamientos. Aunque no sea obvio, pero está ahí.

RCA: Ese bagaje al que os referís os dio también la visión de una galería como negocio. ¿Aplicasteis desde el principio estrategias empresariales a la galería?

IY: Sí, conseguimos seguramente ser conocidos tanto nacional como internacionalmente en un espacio de tiempo más corto que otras galerías, pero también es que con la edad con la que hemos entrado tampoco teníamos tanto tiempo para esperar  (risas)

MS: Teniendo en cuenta siempre que cada sector tiene sus peculiaridades. Las dos éramos dos empresarias y que habíamos tenido además negocios fuera de España, por lo que nuestra presencia fuera también era importante. Esa experiencia la hemos aplicado a la galería, pero la crisis la pasamos todos…

RCA: ¿Cómo es la organización interna de la galería?

MS: Al principio sí entramos con una mentalidad muy empresarial de dividir las tareas, hicimos nuestro plan estratégico, un manual de funciones…pero las galerías en España son muy pequeñas y al final todos hacemos un poco de todo, aunque siempre hay alguien que tiene una responsabilidad mayor en una serie de cosas.

IY: Tenemos un equipo estupendo, de unas ocho personas. Hacemos, verdaderamente, muy buen equipo, desde diseñadores a aquitectos inquietos por la arquietctura tradicional.

MS: Y fuimos más cuando teníamos dos galerías. Hemos llegado a tener tres galerías, porque nos hicimos cargo de DV en San Sebastián ya que, a la que fue luego directora de ARCO la enviaron a Manifesta, y nos quedamos nosotros con la galería. Cada mes y medio hacíamos tres exposiciones.

IY: Era un verdadero tour de force.

MS: Hicimos una media de 18-20 exposiciones al año, durante casi tres años. Entramos fortísimo y ahora estamos más descansadas porque ya no tenemos la galería DV y los dos espacios los hemos unido en uno, pero hemos llegado a ser una plantilla fuerte. Una galería tiene mucho trabajo.

RCA: ¿Qué ferias soléis hacer?

MS: Pues aparte de ARCO, que es nuestra feria, hemos ido a Basel Miami, a París, a Viena, a México, a Dubai, a Berlín…En este primer semestre del año hemos asistido a cuatro ferias importantes: ARCO, Viena, Bruselas y México.

IY: Y la planificación de la logística para asistir a las ferias es durísima.

RCA: Topacio Fresh, que ahora tiene su propia galería, estuvo aprendiendo con vosotras. ¿Os gustó la experiencia de enseñarle a alguien el negocio?

MS: Nosotras tenemos esa experiencia empresarial que antes comentábamos y Topacio es una persona realmente excepcional, tremendamente creativa e inteligente, que vino y nos cayó muy bien. Estuvo trabajando con nosotros -no mucho tiempo, pero sí intensamente- porque quería poner una galería. Ella nos dijo de entrada que venía a aprender porque quería abrir su propia galería y hemos tenido la suerte de que la haya puesto enfrente nuestra.

IY: Nos encantó trabajar con ella. La experiencia es una cosa, pero al final todo el mundo aportamos y Topacio nos aportó sus ideas, sus ganas de hacer cosas, su pasión por el arte, sus experiencias de todo lo que había hecho en Argentina y fue un periodo estupendo y es un placer tenerla como vecina.

MS: Habrá mucha gente que piense: cómo es que a una persona que va a abrir una galería le dejas entrar en tu negocio para que te copie la base de datos, etc. Hoy en día eso es una estupidez, no hay barreras de entrada y menos en el mundo del arte. Las hay en negocios donde existen nuevas tecnologías y el primero que la conoce es el que la aplica, pero donde no hay tecnología no hay barreras de entrada.

No teníamos nada que ocultar y nos pareció magnífico que alguien viniera con nosotras dos. Estuvo una temporada hasta que decidió que se lanzaba y abrió un mes antes que nosotros su galería en este barrio.

IY: Lo hemos hecho antes y lo hacemos ahora. Lo que es necesario es que haya cada vez gente mejor en la profesión. Lo bueno es empujar a que haya sabia nueva y gente cada vez más buena. Así subimos todos. Al final siempre revierte porque revierte en la profesión.

RCA: ¿Cómo veis el panorama de las galerías en Madrid y todas las galerías jóvenes que están abriendo?

MS: A mí me parece perfecto. Esa frescura y atrevimiento que traen los jóvenes es vital para cualquier país. También es cierto que la crisis está haciendo daño a galerías y algunas están desapareciendo, pero eso es ley de vida. El tejido tiene que rejuvenecer. Cuantas más galerías haya en Madrid más importante será el arte, habrá más coleccionistas, más difusión y eso redunda en beneficio de todos.

RCA: ¿Cómo veis el paso del tiempo desde vuestra visión de galeristas? ¿Cómo creéis que han evolucionado las galerías en esto últimos años?

MS: El papel de las galerías está cambiando mucho. El negocio tradicional, a causa de las nuevas tecnologías, está cambiando y todas las empresas se están viendo afectadas. Las galerías tampoco se quedan al margen de esto.

Además se ha producido la apertura de muchos nuevos museos y centros de arte en España. El primero fue en el año 1986, el IVAM en Valencia y antes las galerías cumplíamos un papel fundamental, también de asesoramiento a los coleccionistas y a las instituciones y todas las galerías españolas de esa época traían a artistas extranjeros, con lo cual dieron a conocer nuevos artistas, tendencias… Lo que sucede es que hoy en día el papel de la galería está variando porque ha surgido, como nunca antes y con una gran fuerza, el papel del asesor, el papel del curador, hay museos en todas partes… el arte está de moda…o mejor dicho, está de moda la cultura. Es decir, hay cada vez un público que demanda más cultura, que demanda más arte, la gente visita cada vez más los museos, etc. Las galerías, en ese sentido, estamos en un proceso de transición donde nuestro papel va a cambiar, pero evidentemente el artista siempre tendrá que vender en algún sitio.

IY: Yo creo que nunca ha habido tanta gente interesada en el arte como ahora.

MS: Excepto casos puntuales, en los años ochenta no se veía tanto interés. Hoy en día los jóvenes tienen una mayor educación, un mayor nivel cultural y una mayor sensibilidad para el arte que en los años 80 y en los 90.

IY: Incluso los colegios llevan a los niños a los museos y tienen programas preparados para niños todos los museos.

MS: Cuando nosotras éramos jovencitas estaba solo Fernando Fe y Biosca, hasta que abrió Juana Mordó a comienzos de los 60 y después Elvira González. No había galerías en este país. Nosotros no podíamos ir a galerías y ni a museos de arte contemporáneo.

IY: Teníamos el Prado y la Fundación Juan March. No tiene nada que ver.

MS: Está muy bien que nazcan galerías. Yo creo que tenemos pocas galerías en este país.

RCA: ¿Visitásteis la feria online VIP Art Fair?

IY: Yo intenté entrar el día que tuvieron problemas. Es una cosa que hay que estar al tanto de ello, no cabe la menor duda.

RCA: A vosotras como galeristas, ¿os atrae la idea de participar en una feria online?

MS: Lo online es el futuro y si hay negocio tendremos que entrar. Lo que no vamos a hacer es de espaldas al futuro. Sería absurdo. Hoy era un experimento, pero mañana puede ser una realidad. Nosotras vendemos por internet, pero no usamos el sistema de internet de pagos. Nadie te da la tarjeta de crédito para pagar una obra que, al menos las obras que nosotros tenemos, cuestan mucho dinero. Lo que sí se da es gente que visita nuestra web y sobre todo los coleccionistas en general; muchos arquitectos de la tierra, artístas, gente con cultura que van buscando una obra determinada, nos preguntan y, gracias a ese medio, hemos tenido ocasión de vender obras de arte. Llegará el día que el pago se haga también por internet como se está haciendo en la obra de arte pequeña, en grabados, serigrafías…hay una mayor tendencia a que se utilice medios de pago a través de internet.

RCA: ¿Se ha dado el caso de coleccionistas que han comprado la obra sin verla físicamente?

IY: Sí, pero saben verlas. Saben qué compran. Conocen el tipo de obra y el artista, simplemente les gusta ese tamaño, pero no es un salto al vacío.

MS: Son coleccionistas que están buscando una obra de un artista determinado y lo buscan en las distintas webs de las galerías que trabajan con ese artista a ver si la encuentran.

IY: Igual que se está comprando la ropa por internet. Quién nos iba a decir, en un sitio como España, que se iba a comprar ropa sin probársela. Se está comprando más de lo que yo me podía imaginar vía internet. Me sorprende la entrada en cada vez más sectores.

MS: Todavía en el arte funciona más la información a través de internet que la compra. De ahí que VIP Art Fair era para gente con conocimiento. Es muy distinto ver una imagen de una obra en pantalla que en realidad. El éxito de esa feria es que sea un público muy profesionalizado y coleccionistas muy informados. También los nombres de las galerías son una garantía. Hay que tener mucho cuidado con qué tipo de galerías van para que el mercado tome prestigio. Los agentes tienen que estar cualificados y autenticados.